viernes, 8 de agosto de 2014

De los lamelibranquios, tejidos y perlas

Los lamelibranquios, la clase más numerosa de los moluscos después de la de los gasterópodos, comprende unas 20.000 especies vivas y otras tantas extinguidas.

Los mejillones son lamelibranquios
Una colonia de bivalvos; a esta clase de moluscos pertenecen, entre otros, los mejillones, extremadamente comunes en los mares templados y que se cultivan a gran escala en las rías gallegas para la alimentación.

- ¿Qué caracteriza a los lamelibranquios?


Los lamelibranquios, animales acuáticos predominantemente marinos, tienen la cabeza muy reducida y un doble repliegue del manto, de tal modo que su concha está formada por dos valvas, una derecha y otra izquierda. Las valvas presentan estriaciones denominadas "de crecimiento", dispuestas en torno a un punto dorsal denominado umbo, que corresponde a la zona inicial de desarrollo de la concha. Las valvas están unidas entre sí mediante una charnela cuyos lados presentan denticulaciones y depresiones que encajan unas con otras. El cierre de las valvas se debe a la acción de rebustos músculos transversales, mientras que la abertura se debe a un fenómeno pasivo de retracción de un ligamento elástico. Cuando el animal muere, los músculos se relajan y las valvas permanecen abiertas. El pie está a menudo comprimido, en forma de hacha o cilíndrico, y el animal se sirve de él para excavar en el fango. A menudo está presente en la superficie del pie la glándula del biso en la que se segrega un líquido que coagula en filamentos que emplea para fijarse al sustrato.

- La importancia de los lamelibranquios: especies comestibles y perlas


Antiguamente, a partir de estos hilos se obtenían tejidos de gran precio (en Taranto, en el siglo XVIII florecía la industria del biso). Las especies perlíferas (Pinctada margaritifera, etc.) tienen una gran importancia comercial. Entre los bivalvos se encuentran muchas especies comestibles: ostras y mejillones, que son objeto de cría; almejas y chirlas, de carnes sabrosas pero escasamente digeribles.

- Especies perjudiciales de lamelibranquios


Hay también hay algunas especies perjudiciales: como las especies del género Teredo, que perforan la madera de la parte sumergida de las embarcaciones o las estructuras subacuáticas de los malecones y diques.

- El curioso caso de las tallarinas y los límidos


Interesantes son las tallarinas, capaces de dar saltos mediante la contracción del pie y los límidos que, valiéndose de las velocísimas contracciones de sus valvas, consiguen realizar vuelos de algunos metros o levantarse sobre los fondos marinos realizando auténticas cabriolas.

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