La cartografía es la ciencia que se ocupa de la realización de los mapas geográficos y temáticos utilizando instrumentos y metodologías incluso algunas muy minuciosas. Los mapas con representación de porciones más o menos amplias de la superficie terrestre son el objetivo principal de estudio de la cartografía terrestre.
Los mapas y planos más comunes acostumbran a ser representaciones planares simplificadas hechas a partir de mapas geográficos. Estas representaciones planares, por muy precisas que sean, son siempre aproximativas y no perfectamente coincidentes con la realidad.
Esto se debe a un inconveniente hoy por hoy insuperable con las técnicas y las metodologías actuales de la cartografía; en efecto, se trata de la imposibilidad de reproducir de forma rigurosa sobre una superficie plana, como la de un mapa, la superficie esférica de nuestro planeta.
Una representación fiel es la que da la esfera terrestre, que, sin embargo, resulta un instrumento poco manejable y, además, permite sólo representaciones a pequeña escala y de todas formas no completamente fieles, dado que, como hemos visto, la Tierra no tiene una forma propiamente esférica.
- Los mapas geográficos en la historia
El primer mapa geográfico de la historia es probablemente un dibujo sobre papiro del antiguo Egipto que representa el valle aurífero de Hammarat y que tiene una antigüedad de unos 3.000 años. El uso de dibujos que representan más o menos fielmente las formas de la superficie terrestre es pues muy antiguo. De hecho, todos los pueblos de navegantes de la historia se sirvieron de mapas rudimentarios dibujados a mano sobre la base de observaciones realizadas durante sus viajes y según sus creencias mitológicas. Hábiles cartógrafos fueron, pues, los fenicios y los cartagineses, que tenían gran tradición como marinos. Sin embargo, fue el filósofo griego del siglo VI a.C. Anaximandro el primer y verdadero cartógrafo de la historia. Él realizó, de hecho, la primera representación de la Tierra representando las tierras emergidas y las aguas. Después de él, primero Hecateo de Mileto (siglo V a.C.) y después Dicearco de Mesina (siglo III a.C.) dibujaron mapas representando la Tierra hasta entonces conocida. Dicearco, en particular, realizó un mapa de la Tierra habitada utilizando medidas bastante exactas. Los conceptos básicos de latitud y longitud fueron introducidos por Marino de Tiro en el 120 a.C. mientras, en el mismo período, el ya conocido geógrafo y astrónomo egipcio Tolomeo aplicó a la cartografía el estudio de las proyecciones obteniendo, de esa manera, reproducciones que respetaban las formas de la realidad representada.
Se debe a Tolomeo, también, la primera recolección de mapas geográficos en una especie de atlas y que incorporó a su obra Geografía. En la época de los romanos el uso de los mapas se difundió incluso entre los ciudadanos: por ejemplo, ya en el 40 a.C. se expuso en un lugar público un mapa mural de Italia, para después y por orden de Augusto, ampliarlo a todos los dominio del imperio romano.
A su vez, se empezó a difundir el uso de los mapas de viaje: los itinerarios en los cuales se representaban fielmente, como en un mapa turístico moderno, las distancias entre las poblaciones, las carreteras y caminos, los ríos, las estaciones de cambio de caballos y de posada (las estaciones). la famosa Tabla de Peutinger es un ejemplo de este tipo de mapas. Esta mapa debe su nombre a Konrad Peutinger, que publicó algunas partes. Parece ser que se trata de un mapa de los primeros siglos después de Cristo y consiste en un pergamino de 6,80 metros de largo sobre el cual el autor dibujó a color distintos itinerarios, respetando la relación entre las varias distancias E-O, pero no en sentido N-S, dirección a lo largo de los caminos, los ríos, etc., están distorsionados. De esta manera, el autor redujo la distancia N-S y obtuvo una tira larga pero muy útil. Los griegos y los romanos utilizaron aproximaciones científicas, geométricas, matemáticas y astronómicas para la elaboración de sus mapas, mientras que en la edad media se siguieron ideas más fantásticas y extrañas. En este período tuvo mucha difusión la representación del mapamundi en forma de T contenido en un círculo representando los mares que separan Europa de Asia y África, de los cuales el más conocido es el de Lambert del siglo XII. A partir del Renacimiento y gracias a los grandes descubrimientos de Colón (que utilizó mapas elaborados por Toscanelli) y Magallanes, los mapas se hicieron cada vez mas precisos. El término atlas se utilizó por primera vez en el siglo XVI como título de la famosa colección de mapas del geógrafo flamenco Gerard Mercator, el cual tomó el nombre del frontispicio en el que estaba representado el titán Atlas condenado por Júpiter a sostener la Tierra sobre sus hombros. A Mercator se le considera también el reformador de la cartografía científica. Se debe a Cesare Francesco Cassini (1714-1784) la realización del primer mapa moderno en el que se representa Francia de forma exacta.
- Los distintos tipos de mapas
Los mapas pueden ser clasificados siguiendo varios criterios, según se considere la extensión real de la superficie que representa o que se tengan en cuenta los elementos o las características que en él se reproducen de una determinada área geográfica.
+ Mapas geográficos
Los mapas geográficos propiamente dichos son los que representan partes muy extensas de la superficie de la Tierra desde una sola región (mapas corográficos) hasta continentes o incluso toda la superficie del planeta (planisferios).
+ Mapas topográficos
Se conocen como mapas topográficos aquellos en los que la zona reproducida es más pequeña (una provincia o menos). Aunque, sin embargo, existen mapas topográficos de países enteros. Finalmente, se conocen como planos en el caso de áreas aún más pequeñas, como por ejemplo una ciudad, un barrio o un pueblo.
+ Mapas temáticos (mapas hidrográficos, mapas orográficos, mapas físicos, mapas políticos, mapas históricos, etc.)
Si, por otro lado, los mapas hacen referencia a los elementos o las características del territorio cartografiado se denominarán mapas temáticos. Se trata de mapas que sobre una base geográfica o topográfica reproducen, por ejemplo, la distribución de las aguas (mapas hidrográficos) o de las montañas (mapas orográficos) o ambas (mapas físicos), o también la distribución de los países, regiones, ciudades, etc. (mapas políticos, históricos).
Existen también mapas geológicos en los que se representa el tipo de roca y las características geológicas de una zona determinada; mapas climáticos en los cuales se evidencian las variaciones del clima; mapas etnográficos en los que se reproduce la distribución de las razas; cartas de navegación en las cuales se describen las características del agua del mar y el perfil de las costas. En resumen, se puede decir que no hay ningún límite para los mapas temáticos que se pueden realizar. De hecho, una vez escogida la característica que nos interesa, se puede representar su distribución en el área geográfica más idónea.
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- La Tierra sobre una hoja de papel
+ Las coordenadas geográficas
+ La escala en los mapas
+ Aprender a leer un mapa
+ ¿Cómo nace un mapa?
+ Las proyecciones geográficas