domingo, 4 de septiembre de 2011

Mitosis, meiosis y reproducción

Tanto la mitosis como la meiosis son dos tipos de división celular; sin embargo, tienen diferente función: la mitosis interviene en el crecimiento de los organismos pluricelulares y en la reproducción asexual, la meiosis es imprescindible en la reproducción sexual.

Mitosis, meiosis y biologia

La reproducción es la capacidad que poseen todos los seres vivos para producir individuos iguales o semejantes a ellos. Existen dos modos básicos de reproducción de los organismos vivos, la reproducción asexual y la reproducción sexual.

- Reproducción asexual


Se caracteriza porque interviene un solo organismo que produce copias idénticas de sí mismo. Se da, prácticamente, en todos los seres unicelulares. También es frecuente en plantas y hongos, y ocurre en algunos animales como la hidra de agua dulce.

En los seres unicelulares, la reproducción asexual se produce por medio de una mitosis. A partir de la célula madre se obtienen dos células hijas. En los seres pluricelulares, se produce también mediante sucesivas mitosis, generándose un grupo de células que van a producir un organismo completo.

Mediante la reproducción asexual no se genera variabilidad genética. Como es un proceso muy sencillo y rápido, un organismo que esté bien adaptado a un medio puede dar lugar a un gran número de descendientes en poco tiempo y colonizarlo. Sin embargo, si las condiciones del medio cambian, toda la población que es genéticamente homogénea puede sucumbir por no estar preparada para las nuevas condiciones.

- Reproducción sexual


Intervienen dos individuos que combinan su información genética para formar un nuevo individuo, que tendrá una mezcla de los caracteres de los progenitores. Se da en los seres pluricelulares y en algunos unicelulares.

Dos progenitores aportan cada uno una célula reproductora haploide o gameto (n), que se ha producido mediante un proceso de meiosis a partir de los meiocitos (células madre de los gametos). En la fecundación, se fusionan los dos gametos y forman una sola célula, el cigoto, en la que se restituye el número de cromosomas (2n) de la especie. El cigoto es la primera célula del nuevo individuo. Su desarrollo dará origen al organismo adulto.

La reproducción sexual es más compleja que la asexual, debido a que se produce la meiosis y también a que es necesario que se produzca la fecundación, lo que implica que se encuentren dos gametos de sexo opuesto. Si, pese a estos "inconvenientes", la reproducción sexual se mantiene, es porque aporta un incremento de la variabilidad genética en la descendencia, lo cual puede ser ventajoso para los organismos. Esta variabilidad es consecuencia de:

1. La recombinación genética ocurrida en la meiosis. Este proceso provoca que cada cromosoma intercambie fragmentos con su homólogo.

2. La distribución al azar de cromosomas paternos y maternos. Durante la meiosis, los cromosomas de los progenitores se distribuyen al azar, lo que provoca que un solo miembro de cada pareja de homólogos vaya a cada uno de los gametos.

3. Las diferencias entre los genes. En la fecundación, cada gameto se une con otro que aporta un conjunto de genes diferentes.

El incremento de variabilidad genética puede contribuir a que en un individuo se produzca una mezcla de caracteres más favorable que la tenía cualquiera de sus progenitores. Así, en situaciones adversas, la reproducción sexual puede favorecer la adaptación al medio. Algunos organismos, cuando las condiciones del medio son favorables, se reproducen muy rápidamente por reproducción asexual; sin embargo, cuando las condiciones del medio son adversas emplean la reproducción sexual. Los pólipos o los helechos presentan lo que se denomina reproducción alternante, en la que se alterna una fase con reproducción sexual y otra con reproducción asexual.