En los organismos pluricelares, tanto vegetales como animales, las células que forman tejidos se encuentran en contacto directo unas con otras. Se unen entre sí mediante modificaciones de sus membranas, denominadas uniones intercelulares, visibles solamente con el microscopio electrónico.
- Tipos de uniones intercelulares
+ Tipos de uniones intercelulares atendiendo a su extensión
Atendiendo a su extensión, se distinguen dos tipos de uniones intercelulares:
. Uniones intercelulares tipo zónula
Afecta a todo el contorno de la célula como si se tratara de un cinturón, y suele localizarse en su polo apical, como sucede, por ejemplo, en las células del epitelio intestinal (enterocitos).
. Uniones intercelulares tipo mácula
Afecta sólo a una zona concreta de la membrana plasmática. Es una unión puntual que se manifiesta, por ejemplo, entre las células epidérmicas que constituyen el estrato espinoso de la piel.
+ Tipos de uniones intercelular atendiendo a su estructura y función
Atendiendo a su estructura y función, se diferencian uniones comunicantes, uniones estrechas y uniones adherentes o desmosomas.
- Uniones comunicantes
En ellas existe un pequeño espacio intercelular de apenas 30 nm, con lo que las membranas celulares no llegan a contactar y permiten el paso de pequeñas moléculas entre dos células adyacentes. Se pueden distinguir dos tipos:
+ Sinapsis químicas
Sinapsis químicas, que se realizan entre dos neuronas separadas por un espacio o hendidura sináptica en el que la neurona presináptica libera, mediante exocitosis, la señal química o neurotransmisor, contenido en las vesículas sinápticas. Esta señal se difunde a través de la hendidura sináptica hasta llegar a la membrana de la otra neurona, denominada postsináptica.
+ Uniones en hendidura o de tipo gap (del inglés, hendidura)
Este tipo de unión deja entre las dos membranas plasmáticas una hendidura lo suficientemente ancha como para permitir el paso entre ellas de moléculas relativamente grandes.
La unión se realiza mediante conexones, que son estructuras cilíndricas transmembranales formadas por la asociación de seis moléculas de una proteína (conexina). Estos conexones tienen un diámetro de 6 nm y dejan en su centro un canal acuoso de 2 nm.
Además de unir dos células contiguas, los conexones ponen en comunicación ambos citoplasmas, pudiendo pasar a través de ellos iones y pequeñas moléculas hidrosolubles; de este modo, se establece una cooperación metabólica. Por este motivo, a estas uniones se las denomina comunicantes. Este tipo de unión es frecuente en las células musculares lisas y constituyen el miometrio del útero, las cuales aumentan a medida que avanza la gestación.
- Uniones estrechas
Son regiones especializadas de la membrana que impiden el paso de cualquier molécula entre las células, ya que el contacto que se establece entre las membranas de células adyacentes obtura completamente el espacio intercelular. También se denominan herméticas o íntimas. Suelen ser uniones de tipo zónula, y se encuentran en las células endoteliales de los vasos sanguíneos, en los entericitos y en los hepatocitos que delimitan el canalículo biliar.
Las membranas de las células adyacentes se mantienen juntas gracias a la unión a modo de cremallera entre proteínas transmembrana de una célula y otra. Las proteínas implicadas son la cadherina, la cingulina y las denominadas ZO que, a su vez, interactúan con los microfilamentos de actina de los respectivos citoesqueletos.
Sin embargo, se ha demostrado que las células del sistema inmunológico pueden atravesar estas uniones y penetrar en los tejidos inflamados, ya que son capaces de enviar una señal específica que abre esta unión, permitiéndoles el paso.
- Uniones adherentes o desmosomas
Mediante estas uniones, las células se mantienen unidas mecánicamente, haciendo que el conjunto funcione como una unidad estructural. Se localizan preferentemente en aquellos tejidos que se encuentran sometidos a fuertes tensiones mecánicas, como el músculo cardíaco, el cuello del útero o el epitelio cutáneo.
Las membranas de las células vecinas se acercan, pero no se fusionan; quedando un espacio intercelular de 25 a 40 nm ocupado por material poco denso que, en ocasiones, puede presentar una línea central osmiófila equidistante entre ambas células.
+ Estructura general de las uniones adherentes o desmosomas
Las uniones adherentes presentan una estructura general que implica:
. La existencia de una proteína transmembrana que, en el caso de las uniones célula-célula, es de tipo cadherina y, en la caso de las uniones célula-matriz, es de tipo integrina.
. Unas proteínas de unión que medien la unión entre las proteínas transmembrana y el citoesqueleto (microfilamentos o filamentos intermedios).